Cómo superar las crisis de los 30 años
El 30 es un número que impacta, que te hace replantearte puntos importantes en tu vida, y ¿por qué? es un año más, entonces ¿porqué sentimos esa presión repentina? ¿Es real las crisis de los 30 años?
Aunque tú no seas de esos que parece que se les acaba el mundo como si fuesen futbolistas y se les terminara la carrera, seguro que has notado esa sensación, por muy leve que fuera.
Lo que pasa con los 30 es que es una fecha con un componente cultural muy arraigado en todos nosotros.
Aunque hoy en día tenemos aceptadas diferentes formas de vivir y de cómo puede ser nuestro futuro, en nuestro subconsciente los 30 es un momento de inflexión. Sea la que sea la vida que quieres o que te gustaría tener, el entrar en la treintena nos hace sentir que tenemos que decidirlo ya y con seguridad, como si no tuviéramos tiempo para más pruebas y errores, como si hasta ahora hubiéramos estado jugando a la DEMO y ahora nos llegará el juego real.
¿Qué puedes hacer para superar la crisis de los 30?
Relativiza.
Hace un año estabas celebrando tus 29 a todo trapo y ahora estás agobiado por si es mejor meterte en una hipoteca o seguir de alquiler. Relájate, lo importante es buscar el estilo de vida que más felicidad te aporte.
Asume el control.
¿Conoces a algún amigo que siente que no ha escogido absolutamente nada de su vida, como si se hubiera dejado llevar siempre? Este es uno de los dramas que más frustración crea a la larga. ¿Qué es lo que te gusta hacer? y ¿Qué eres bueno haciendo? son las dos preguntas que deberías hacerte, si investigas y trabajas en ellas te asegurarás encontrar un camino adecuado a ti.
Relaciones.
El miedo a la soledad trae muy malas decisiones consigo. Las relaciones son complicadas y más si le sumamos miedos de perdida, soledad, abandono, presión social etc. No tenemos ninguna receta mágica, lo que sí sabemos es que si te enfocas en hacer algo que te encanta y tu vida rota entorno a ello atraerás personas que encajen con ella, sea tu pareja, amistades, mascotas … y no te sentirás solo,
Agradece y vive.
El mundo es bastante superficial y te hará sentir impotente si no has conseguido dinero, poder o las dos cosas. Muchas personas relacionan el bienestar económico a una fuerte autoestima y en realidad es más una dependencia. Según varios estudios, las personas más felices son las que gastan su (poco) dinero viajando, teniendo experiencias únicas, conociendo nuevos lugares, probando nuevos restaurantes etc.
La riqueza de la vida la sentimos mediante experiencias vitales. No te preocupes por cuanto dinero consigues ahorrar, el dinero llegará pero el tiempo no vuelve.
Asume los acontecimientos.
A los treinta seguramente ya habrás vivido algún tipo de perdida, algún familiar mayor o una ruptura dolorosa. Asumir los momentos difíciles de la vida parece fácil, pero no siempre lo hacemos de la mejor manera y entramos en un estado de nostalgia de cuando éramos niños y nada malo nos pasaba. Respeta tus tiempos de duelo y date el espacio para sentir y aceptar.
Y sobre todo ... Cuídate, hombre.
