¿Qué es y por qué tengo piel de gallina?
Ayer fui a ver una película al cine, ¡y me pasé todo el tiempo con el pelo de punta! Y, para ser sincero, he de admitir que no es la primera vez que me pasa… (Sobre todo los días de frío o en situaciones puntuales). Pero, ¿por qué tengo piel de gallina?
¿Qué es la piel de gallina?
Aunque pienses que se te pone la piel de gallina sin motivo, lo cierto es que es una cuestión fisiológica; es decir, una reacción involuntaria que, generalmente, tenemos todos los mamíferos con pelo. Durante esta situación, en nuestro organismo se contraen los músculos erectores del vello (que se encuentran dentro de los folículos pilosos).
Esta reacción se produce en relación con el sistema nervioso simpático; esto es, el encargado de la frecuencia cardiaca, de las secreción de algunas glándulas y del tamaño de las pupilas, por ejemplo. De esta manera, nuestra epidermis sufre un cambio en su aspecto, ya que se expanden los poros pilosos provocando que el pelo se erice.
Además, que se nos ponga la piel de gallina también puede llegar a ser una respuesta de liberación de adrenalina. ¿De verdad creías que era casualidad que se te pusiese el pelo de punta en situaciones de frío, estrés o miedo? ¡Absolutamente no! Este tipo de estímulos provocan un aumento del ritmo cardíaco y de la presión sanguínea (además de que la capacidad mental de respuesta se vuelve mucho más ágil). Por otro lado, también podemos llegar a notar temblores o sudoración en las manos… ¿Soy al único al que le suele pasar?
¿Dónde suele aparecer la piel de gallina?
Los lugares más frecuentes donde los humanos sufrimos esta reacción involuntaria son los antebrazos, el cuello, la nuca, las piernas y el rostro. Además, como curiosidad (por si te interesa) he de decirte que la piel de gallina no suele suceder en la superficie pilosa de los genitales, de las manos o de los pies.
¿Para qué sirve la piel de gallina?
Según los expertos, la piloerección (como científicamente se le conoce) tiene una doble función que proviene de nuestros ancestros:
- Protegernos del frío: al contraerse los músculos erectores del vello se crea una capa de aire alrededor de nuestro cuerpo que ayuda a mantener la temperatura corporal. No obstante, en el caso de los humanos no llega a ser del todo efectivo, ya que no tenemos la suficiente cantidad de vello corporal como para que nos proteja de las bajas temperaturas de manera considerable.
- Responder a emociones intensas: el cuerpo es sabio, por lo que ante situaciones peligrosas o que nos causan miedo, se pone en alerta (por si acaso). En el pasado, que el pelo se erizase era una respuesta del organismo para “intimidar” al oponente (el factor que nos causa estas emociones fuertes). Sin embargo, y aunque en los gatos a día de hoy se siga llevando a cabo esta reacción para intimidar, en la actualidad no resulta un método de defensa efectivo en el caso de los humanos… Es más, en la actualidad la piel de gallina se asocia más con el miedo, ¿no crees?
Así que, a partir de ahora, cuando sufras esta reacción involuntaria del organismo, no te asustes, ¡porque es completamente normal! De todas formas, si no quieres que se desarrolle, prueba a evitar las situaciones que te causen estímulos de miedo, peligro o frío...
